martes, 25 de diciembre de 2007

Al fin del mundo


Dos desconocidos se cruzan en la calle. Se observan a medida que se acercan, a cada paso recorren con la mirada al otro. Se detienen. Ella lo mira a los ojos. Él dirige la mirada a su boca. Ambos quedan allí, suspendidos en el tiempo, mirando fijo al otro, esperando una señal de movimiento, pero no aparece. Nadie da la voz de ataque, nada incita al contacto verbal entre ellos dos: todo quieto. Quedan así unos minutos... Varios. Ella cierra los ojos. Él aún la observa. De una manera inesperada, ella se da vuelta y comienza a caminar. Él comienza a correr detrás. La toma del brazo. Y nuevamente se la queda mirando. La situación es absurda. Nuevamente ambos parados, mirándose. Ella abre la boca:- Si no vas a llevarme al fin del mundo, por lo menos no me detengas...- Él se queda plasmado, y su mente es un remolino de ideas. Mueve la cabeza negativamente, y comienza a caminar. Ella lo ve alejarse, suspira y sigue su camino, buscando alguna manera de llegar y escapar de la epidemia de tristeza en la ciudad.



***

Feliz Navidad y que tengan un buen 2008

© 2007 Jaki CS

3 comentarios:

isol dijo...

me gustó

Ale dijo...

La cantidad de historias que mueren en un sueño no cumplido, en ese miedo a fallar, a no saber dar lo que el otro necesita. Y muchas veces no nos damos cuenta que la otra persona espera lo que somos, ni más... ese pedacito de sonrisa que escondemos... esa certeza de saber que estaremos junto a ella pase lo que pase.

Y tal vez uno quiere hacerlo, pero las desilusiones, los fracasos.... todo se convierte en un castigo eterno que nos imponemos nosotros. Y dejamos pasar la vida una vez más, para en un tiempo arrepentirnos y preguntarnos por qué es que nos sucede eso.

Siempre digo que a lo que más le tengo miedo, es al miedo mismo. A esa posibilidad propia de arruinarnos en un segundo una vida entera.

Lulú dijo...

Es precioso, realmente muy bueno.
Me encanta la manera en la que expresas los sentimientos de los personajes...
La tristeza la llevamos todos un poco aunque no queramos...