miércoles, 19 de agosto de 2009

Frágil

Cada noche sigue amaneciendo, encontrándome encerrada entre las sombras de mis sueños. Aquellos que me dan la libertad de hacer y decir sin restricciones; la misma libertad que me acosa hasta el punto en que mi inconsciente se resiste a recordar.
Es en mis sueños que te veo y te digo todo lo que quisiera y siempre callo. Es en mis sueños cuando puedo hacer cosas como si no me importara el mañana. Cuando puedo mirarte a los ojos y dejar que mis piernas tiemblen ante tu impresionante poder de hacerme estremecer. En mis sueños aún recuerdo el calor y la protección que me daba tu compañía por las noches.
Pero son esos mismos sueños las cadenas a este estado inerte que no me deja respirar. Son sueños también los que me recuerdan que ya no tengo derecho alguno sobre tus labios. Sueños en que te vas sin ningún reparo dejándome desamparada en la oscuridad. Sueños a los que hoy les tengo miedo.
Sueños por los cuales paso las noches en vilo con tal de no soñarlos.

1 comentario:

Lully dijo...

Que tengas sueños bonitos para que amanezca tu alma y tu cuerpo radiantes.

Hugs again my friend!