lunes, 10 de agosto de 2009

Poder, podríamos...

Podríamos sentarnos a leernos uno al otro por largo tiempo, cada uno con su estilo particular. Podríamos ponernos frente a frente buscando encontrar pasajes de nuestros cuerpos desconocidos hasta el momento. Podrías mirarme a los ojos para desnudar mi alma sin ningún esfuerzo, y yo podría buscar en tu boca esas puertas al paraíso que mantienes ocultas.
Hemos podido y podríamos hacer muchas cosas. Hemos dado vueltas por las palabras para encontrarles significados que saltan a la vista. Podrías mentirme una y otra vez, como lo has hecho otros días. Podría decirte las verdades que jamás pudiste hacerme confesar.
Por último, podríamos ver el camino que fuimos dejando atrás a cada instante, con cada beso y cada pelea. Con cada huida y cada vuelta. Podríamos pararnos un segundo y mirar como el tiempo nos alejó de aquellos dos jóvenes que una vez se conocieron.
Pero bien se sabe que mirar atrás sólo nos demora, y seguir caminando es la única salida que queda. Yo podría intentar convencerte de que vengas conmigo utilizando mil argumentos sofistas, pero elijo seguir caminando, la decisión de acompañarme es sólo tuya.

1 comentario:

Café (con tostadas) dijo...

ouch... querida! que patada ninja!

y sí, evidentemente soy de las que siguen caminando. y hasta el momento no han decidido acompañarme...

Ojalá tengas mejor suerte!

Beso